El conflicto se “nacionaliza”; hay bloqueos en Santa Cruz, marchas en Tarija y La Paz
La protesta contra el gobierno de Evo Morales por un incremento salarial del 15 por ciento y la derogación del inefable Decreto Supremo 21060 comenzó a “nacionalizarse”, es decir a alcanzar dimensión nacional, con marchas organizadas por los maestros y trabajadores en salud en los departamentos de Santa Cruz, Cochabamba, Tarija, Beni, Pando y tiende a extenderse más, en caso de que el gobierno no halle una pronta solución al conflicto que data de hace casi 10 días.
La Paz amaneció hoy bloqueada por centenares de maestros rurales, desde las 06.00 horas, lo que generó un caos vehicular y perjudicó la vida cotidiana y las actividades de miles de personas que transitan por las calles de la sede de gobierno.
Casi inmediatamente después la escalada de movilizaciones se extendió a Cochabamba, donde el dirígete de la Central Obrera Departamental (COD), Gustavo Moreira, señaló a radio Pío XII de la Red Erbol, que los maestros, fabriles e incluso los gremiales se organizaron para bloquear las calles principales de la ciudad capital.
Paralelamente, en el municipio de Guarayos, capital de la provincia del mismo nombre en el departamento de Santa Cruz, al menos 1.000 maestros comenzaron a bloquear la vía que une Trinidad con Santa Cruz. En el mismo departamento, los trabajadores del magisterio de la Provincia Ichilo realizan bloqueos intermitentes en la carretera hacia Cochabamba.
La protesta alcanzó dimensión nacional, es decir se “nacionalizó”, en el transcurso de las últimas horas con las protestas de trabajadores en Yacuiba y Tarija, donde se encuentra el Presidente Evo Morales para celebrar un aniversario más de ese departamento, pero tuvo que suspender muchas actividades debido a que los maestros prácticamente tomaron la plaza Luis de Fuentes.
En una acción muy bien coordinada, los maestros se convirtieron en la punta de lanza de la protesta también en Cobija, capital de Pando; y Riberalta, ciudad industrial del departamento del Beni.
En tanto, el gobierno se animó a convocar a otra ronda de diálogo a la Central Obrera Boliviana (COB), cuyos dirigentes decidieron revisar el último preacuerdo tanteado con el Ejecutivo, con lo que las negociaciones entró en un punto muerto.
Post a Comment